Después de 12 intentos fallidos de atragantarme por parte de esas viscosas ovoides, cuyo color verde la delatan, de la alegría desbordante del champagne y del merecido carbón recibido de esos Reyes Magos y no tan Magos, vuelvo con ganas de guerra.Y es desde este Horizonte sureño, donde permanezco inmóvil, desde donde contemplo con cierta ironía el paso del tiempo..., ese tiempo dueño de todo cuanto sucede y pasa a mi lado, ese culpable indiscutible de la suma sinfín de un nuevo numero a mi vida.
Y que decir?
Hace 5 años
dueño y además egoista. Pasa a us aire y mas que compartir, el tiempo,nos engaña.
ResponderEliminarMe han gustado mucho vuestros posts.
Un abrazo